Dr. Gregorio Skromne Kadlubik
Depto Fisiología de Lab. De Radionúclidos Facultad de Medicina, U.N.A.M.
En 1912, un Ginecólogo italiano, registró por vez primera la regresión de un cáncer cérvico -uterino, en una mujer que fue inoculada, con una vacuna para la rabia, Este fue el primer indicio en la historia de la medicina moderna, de que los virus pudiesen ser benéficos para combatir ciertos tipos de cáncer (l); hasta finales de la década de los 40, los médicos se atrevieron a inyectar virus en pacientes cancerosos, de manera intencional, pero con escasos resultados benéficos; pero en la década, de los 60, se descubrió que el virus de la enfermedad veterinaria del “Newcastle”, presenta una preferencia por infectar las células tumorales, descubrimiento que se efectúo en cultivo de tejidos cancerosos en laboratorio experimental; con remisión de las células cancerosas, (aunque se cuestionó si el efecto era por activar, el sistema inmunológico del organismo) (2). Más recientemente, en los 70’s y 80’s, dos grupos diferentes de médicos, describieron que pacientes con linfomas, mejoraron después de haberse contagió do con el sarampión (3); finalmente, surgió el concepto de la viroterapia en la década de los 90, cuando los Dres. Frank McCormik (4) y Daniel R, Herderson (5), de los EUA, publicaron (cada uno, por su lado), que lograron dirigir virus a células cancerosas, humanas, insertadas en ratones, y lograron eliminarlas usando adenovirus, el causante del -resfriado común.
Existen dos técnicas actuales, para enviar los virus hacia las células cancerosas, sin causar daño colateral a células sanas: el primero de ellos, se conoce con el nombre de “blanco transduccional” (“Transductional Targeting”), y es el método más aceptable de los dos, por la mayoría de los investigadores (4).
El segundo método se llama “blanco transcripcional” (Transcriptional Targeting) y requiere de alterar los virus usados, para que sus genes, solo sean activos, sobre las células tumorales (5) introduciendo anticuerpos selectos en los brazos de los virus, se logra que estos sólo infecten las células cancerosas (por una proteína específica, sólo presente en células tumorales), y de ésta manera “revientan” la célula cancerosa y no atacan a la célula no cancerosa; así es como se logra técnicamente fabricar el sistema de “Blanco Transduccional” (4); otra técnica similar une los adenovirus a las proteínas celulares llamadas integrinas, que sé producen en abundancia, especial mente en las células tumorales (3).
En cambio, las técnicas de “Blanco Trascripcional” usa “switches” genéticos llamados “promotores” de tipos particulares de células, por ejemplo, en el Cáncer de Hígado, el promotor del gene de la alfafetoproteina (que normalmente desaparece, cuando el feto madura) es reactivado, y puede ser reutilizado, introduciéndolo a un adenovirus, para atacar por viroterapia al cáncer hepático; de igual manera usando como promotor al antígeno prostático especifico, se puede enviar un virus “cargados” con este promotor para atacar el cáncer de próstata (5).
Finalmente, ambos métodos Transduccional y Transcripcional, pueden combinarse para lograr atacar una de las formas más agresivas del cáncer como lo es el melanoma (cáncer de piel) (2); algunos investigadores actualmente, están armando a los virus terapéuticos, con curvas de quimioterapia, como 5-fluoracilo o campotecina, con buenos resultados en células cancerosas, colónicas implantadas en ratones (4). Algunos otros investigadores, están marcando estos virus terapéuticos con proteínas fluorescentes, para visualizar por endoscopía los tejidos cancerosas, que son atacados, como en los casos de cáncer de laringe (5), y finalmente llegamos a la marcación con Radionúclidos de los virus contra células cancerosas, que inicia una era que se podría llamar de Radiovirodiagnóstico (para visualizar tejidos cancerosos) usando emisiones gamma para Centellografías diaznósticas “in Vivo” y emisiones Bettas, para “bombarderar” tumores cancerosos específicos (Radioviroterapia) como son: cáncer de Hígado, cáncer de próstata y otros, que logramos marcar con radionúclidos, como publicamos en un reporte previo (6).
Creemos que éstas nuevas técnicas de Radioviro diagnostico y Radio viroterapia que hoy proponemos, tienen mucho futuro en Medicina y esperamos presentar nuestros nuevos resultados en esto campo en futuras publicaciones. (Ejemplo: CA Hígado: Fig. No. 1)
NOTAS: ADDENDUM; actualmente, ya se usan virus del herpes simplex, de la vacuna antivavidosa (vaccinia) ) del parvovirus y de los reovirus.
2° El adenovirus, también se ha, usado en genoterapia, en lugar de los retrovirus.
3° La estrategia actual, se orienta a dar drogas inmunosupresoras, al mismo tiempo que la viroterapia, para modificar la respuesta inmune del organismo al envío de adenovirus, para atacar células cancerosas.
Palabras Clave: Virodiagnóstico, Viroterapía, Radionuclidos.
Key Words: Virodiagnosis, Virotreathment, Radionuelides.
BIBLIOGRAFIA
1.- Nettelbeck D.M. y Jerame V, & Muller R. “Trends in Genetics”, Vol. 16 pág. 174-78 (2000).
2.- Alemán y R. y Balagué C. & Curiel. “Replicate adenovirus for Cancer Nature, Biotechnology Therapy. Vol. 18, p, 723-727 (2000),
3.- Curiel D.T. & Douglas J.T. Editors. “Vector Targeting por Therapeutic Gene Delivery” John Wiley & Son (2002).
4.- Ring C.J.A. “C y Tolytic Viruses as Potential anti-cancer agents” Journal of general Virology. Vol. 83; pág. 491-502 (2002).
5.- “Genetherapy clinical database”. Journal of gene Medicine. www.astg.org. (2002).
6.- Alvarez J. & Skromne Kadlubik G. “Labell of DDD I-131 (1973) Inter applied Isotopos 24:187.
