La Cámara estrena diputados
Califican de “inviable” al seguro popular

Jani Luna González y Valentín Cardona
1 de Septiembre de 2003

Poco antes de la instalación formal de la LIX Legislatura de la Cámara de Diputados, que por cierto comenzó con 40 minutos de retraso, tres nuevos legisladores que serán claves para despejar el futuro incierto que se cierne sobre la salud y seguridad social del país conversaron con Imagen Médica.
Todos se manifestaron “emocionados”, presos de una indescriptible sensación “muy especial”, y “comprometidos” con su nuevo encargo y sus representados. Ninguno sabía su destino respecto al trabajo a desarrollar en las diversas comisiones de la Cámara, “pues esa es una decisión de los coordinadores parlamentarios”, aseguraron.
Los tres personajes forman parte medular de las tres instituciones de salud y seguridad social más importantes del país que el foxismo mantiene hoy “al borde del colapso”:
Roberto Javier Vega Galina, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS); Marco Antonio García Ayala, secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) y Concepción Oliva Castañeda Ortiz, secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE (SNTISSSTE).
Vega Galina se sentó como diputado a mes y medio de la revisión contractual del Contrato Colectivo de Trabajo con el IMSS, bajo la fuerte presión del director, Santiago Levy Algazi, de revisar ya el Régimen de Jubilaciones y Pensiones. Conocido como “el enemigo número uno de los trabajadores del IMSS”, Levy achaca a los trabajadores la “fragilidad” de la Institución.
García Ayala, tomó la diputación en los momentos en que la Secretaría de Salud sufre, bajo el mando de Julio Frenk Mora, la etapa de desprestigio e ineficacia más severa de su historia, avalada recientemente por la adicción de Guido Belsasso a la corrupción -pero descubierta afortunadamente por Jaime Avilés en La Jornada-. A ello se suma el azote del sarampión, la proliferación del dengue hemorrágico y la diseminación del virus del Oeste del Nilo a lo largo y ancho del territorio nacional.
Como remate, pesa sobre el todavía secretario de Salud la sospecha de hacer “menos por la salud con más dinero”, que sus antecesores.
Castañeda Ortiz asumió la diputación en los momentos en que el foxismo pretende hacer una reforma al ISSSTE. Conocida como la “reforma espejo del IMSS”, es, en efecto, una burda copia a la que el sindicato ya rechazó de manera “tajante”. Bajo el mando de Benjamín González Roaro -títere de Elba Esther Gordillo Morales-, el ISSSTE vive hoy también momentos angustiosos y de putrefacción causados por la supuesta quiebra de sus seguros: el médico y el de pensiones.
Por cierto que, el 29 de agosto, primer día de trabajo de la LIX Legislatura, Gordillo Morales sufrió, según algunos analistas políticos, su primera “caída”, pues luego de cuatro horas de suspenso, no logró sumar a su inmenso poder la presidencia de la mesa directiva del primer periodo ordinario de sesiones de la Cámara de Diputados. Se la “ganó” Juan de Dios Castro Lozano, panista de viejo cuño exconsejero de Fox que a sus 61 años comienza su sexto periodo como legislador. Paradójicamente, Castro Lozano coincide con la líder magisterial las cuatro veces en que Gordillo Morales, a sus 58 años, también ha sido “representante popular”.

COINCIDENCIAS

Vega Galina, García Ayala y Castañeda Ortiz son diputados de representación proporcional por el PRI. El estrepitoso derrumbe del PAN -el pasado 6 de julio-, más que los triunfos del PRI, dio a los tres líderes sindicales la oportunidad de reivindicarse con sus bases y de cumplir con sus metas y proyectos. Los tres coinciden en que es necesario fortalecer la salud y la seguridad social y, en breves entrevistas, dejaron ver sus posiciones.

Roberto Javier Vega Galina

— ¿Cuáles son sus proyectos como diputado?, ¿a qué comisión le gustaría ir?
— Creo que nosotros podríamos encajar en la de Seguridad Social, pero esa no es una decisión de Roberto Vega, sino de los coordinadores parlamentarios que están negociando las diferentes comisiones, pero el Sindicato del Seguro Social tiene el perfil para estar en esa comisión.
— ¿Piensa meter una iniciativa para revisar al seguro popular?
— No. El seguro popular va a ir perdiendo fuerza, porque es un programa que nació sin recursos y sin infraestructura. Lo que hay que fortalecer es a la seguridad social, a las políticas sociales que sí han dado resultados en este país.
— ¿Tiene algún proyecto en especial?
— Defender y fortalecer a la seguridad social, ojalá haya los grandes consensos en ese tema, y para que todo lo que se dicho -del diagnóstico de las instituciones de salud-, pues nos sentemos en una mesa de análisis y de toma de decisiones para fortalecerlas. Las anteriores legislaturas se han quedado nada más en puros proyectos y declaraciones, pero no han tomado decisiones para fortalecer a la seguridad social.
— Sabemos que el IMSS pidió la revisión del Régimen de Jubilaciones y Pensiones (RJP) en la próxima revisión del Contrato Colectivo, ¿lo hicieron en tiempo y forma?
— El RJP es un trabajo que se viene haciendo -no en ésta revisión contractual- desde hace más de cuatro años. Hay un trabajo serio, que como sindicato y como representante nacional me corresponde, pero obviamente con consenso de la base trabajadora. Si en el proceso y el proyecto que presenta el Instituto y el proyecto que nosotros presentemos llegamos a tener el consenso y los acuerdos, pues nosotros estamos muy interesados en que se fortalezca nuestro RJP, pero sobre todo, que lo conservemos para los que están ahorita jubilados y para los que vamos a tener la oportunidad de jubilarnos.
Este es un trabajo que ya no puede esperar, el número de jubilados y pensionados se incrementa todas las semanas -entre 500 y 600 compañeros- y es un problema que tenemos que enfrentar, y que vamos a tener que resolver, pero siempre bajo esas premisas.
— ¿El IMSS sí metió la revisión del RJP?
— No la metió, es una negociación que se ha venido dando, no está en el pliego petitorio de nosotros. El Consejo del mes de abril me dio a mí la confianza y la responsabilidad de negociar el RJP.
— ¿Entonces no se va a tocar en el Congreso de octubre?
— Si nosotros tenemos el consenso y los acuerdos como sindicato podríamos ponerlo en la mesa de discusión, pero si se aprueba o no se aprueba no es cosa de Roberto Vega, los acuerdos que se tengan en la próxima revisión contractual los lleva a cabo el Congreso Nacional.
— Dicen los senadores que Levy insiste en que el Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) es muy oneroso y que tiene contemplado rasurar algunas cláusulas…
— La comisión ya está trabajando desde el lunes pasado, y nuestro pliego petitorio es hacia adelante, nunca hacia atrás. Nosotros no vamos a permitir eso.
— ¿Aunque Levy insista en que el desfinanciamiento se debe al CCT y al RJP?
— Ese ya es un tema muy trillado. Nuestras prestaciones no han sido en forma unilateral, en todas las revisiones ha participado el Instituto y hemos firmado en forma conjunta, ahora se dicen sorprendidos y dicen que nuestras prestaciones son onerosas y que el contrato es obeso, pero no. Pueden hacer una corrida actuarial de nuestro contrato y nuestras prestaciones nos las ganamos, no nos las regalan ni son como las quieren hacer ver, como que es un privilegio ser trabajador del Seguro Social.
— ¿Va a tratar de venir a todas las sesiones?
— Claro, trabajaré al triple, sin descuidar, primero, a mi organización. Tendré el derecho y la obligación de cumplir también como legislador.

Marco Antonio García Ayala

— Su opinión sobre el caso Belsasso.
— Indiscutiblemente es una situación personal, la propia Secretaría de Salud cuenta con los mecanismos de control correspondientes a la Contraloría, como se sabe, es competencia de la Secretaría de la Función Pública, pero es una actitud netamente personal que no debe afectar a la institución y mucho menos a los trabajadores.
— Se dice que después de Belsasso, sigue en la lista Julio Frenk.

— Es a las instancias competentes del gobierno a las que corresponde valorar el papel y la función del secretario Julio Frenk, por parte del sindicato yo expreso que es avalado en cuanto a su responsabilidad como funcionario público. Lo de Belsasso es una situación personal.
Las relaciones que tenemos con el secretario de Salud, Julio Frenk, son netamente administrativas, laborales y políticas, van con un respeto mutuo institucional, de coordinación y diálogo permanente.
— ¿Cómo ve al seguro popular?
— Es algo que tendrá viabilidad siempre y cuando logremos que la fuente de financiamiento sea la indicada para que pueda operar, de otra manera, no le vemos viabilidad.
— Sin embargo, se está implementando en diversos centros de salud…
— Se está implementando porque se dio origen mediante un programa piloto, y una vez que se instrumentó, entrará en vigor a partir de enero del 2004. Es precisamente por eso que en este año, en materia de presupuesto, tengamos que ver como incrementar la inversión en salud.
Inversión en salud es precisamente darle factibilidad para que la reforma a la Ley General de Salud opere a través de esa creación del programa de protección en salud, a través de un incremento en inversión en salud, de otra manera, sería muy complicado. Como en este momento se presenta en algunas entidades, donde nos faltan médicos, enfermeras, insumos y equipo, de esa forma no podemos garantizar los servicios de salud como se deben garantizar, con calidad en la propia prestación de los servicios.
— ¿Se espera alguna modificación o iniciativa por parte de usted?
— Nosotros estaremos participando tanto en el área de la salud, como en la seguridad social, y desde luego, insisto, en que logremos que en el presupuesto de egresos podamos incrementar la fuente de financiamiento para los servicios de salud. Esa es nuestra tarea primordial, que será en este año indiscutiblemente para reorientar las políticas económicas en materia de salud, en gasto social, que es básicamente lo que nos ayudaría a impulsar la prestación de los servicios de salud.
— Su proyecto y su compromiso con los trabajadores y con el pueblo.
— Es un compromiso de trabajo, de buscar las mejores condiciones para que podamos intervenir en las reformas -como la laboral y la de seguridad social- para garantizar -como es el caso particular el sistema de pensiones- para que se cuente con un sistema de pensiones dignas para los trabajadores al servicio del Estado que en su momento opten, de acuerdo a la ley, por un retiro a través de recibir una pensión que establece la propia ley del ISSSTE.
Y reiterar nuestro compromiso social con toda la sociedad mexicana y en lo particular con los trabajadores al servicio del Estado.

Concepción Oliva Castañeda Ortiz

— ¿Cómo se siente?
— Muy bien, con un alto compromiso al estar aquí, en una representación tan importante como el ser legisladora.
— ¿Cómo ve el proyecto de reforma a la Ley del ISSSTE?
— Lo que presentó la Secretaría de Hacienda, y que se publicó tanto, efectivamente es una copia de lo que se hizo en el IMSS, pero la organización sindical, el sindicato, manifestó inmediatamente su rechazo a ese proyecto de reforma.
— ¿Se espera la participación de usted para modificar este proyecto?
— Acabamos de celebrar nuestro décimo consejo como organización sindical y ahí manifestamos la posición de la organización respecto a cualquier reforma a la Ley del ISSSTE. Obviamente que es un tema que no podemos soslayar, en el que no podemos pensar que el rechazo es la solución para encontrar la viabilidad del Instituto.
Estamos seguros que hay que entrarle a la reforma, pero como le hemos hecho muchas veces: con la participación de nosotros como trabajadores, independientemente de esta representación, como trabajadores, están obligados a darnos vista de cualquier proyecto de reforma que se pretenda.
— ¿Le ve viabilidad al seguro popular?
— Mientras no definamos sobre que bases financieras va a trabajar cualquier institución de salud, el seguro popular desde nuestro punto de vista tendrá severos problemas.
— Sin embargo, ya se implementó en varios estados.
— Sí, nada más que cuando nos tocara a nosotros dar servicios de acuerdo con las normas para recibir el seguro a través de este sistema nacional de salud, entonces la derechohabiencia que va a pagar por recibir este servicio se va a dar cuenta que si no tenemos los recursos suficientes para dárselo a los que ya son derechohabientes -por razón de su relación laboral con el Estado-, tampoco tendremos las mínimas condiciones para dárselos a los que no lo son.
— ¿Qué esperan los trabajadores y los derechohabientes del ISSSTE ahora que es diputada?, ¿cuál es su proyecto?
— Básicamente buscar que el presupuesto sea asignado de manera suficiente para poder dar dos servicios fundamentales: lo que se refiere al fondo médico y lo que se refiere al fondo de pensiones. Si hay un presupuesto insuficiente, no tomaremos partidas de otras áreas para darle a estos dos fondos.

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