Por: Karen Cervantes
Twitter: @karencitoww
Género: Acción, suspenso.
Director: Clint Eastwood.
Reparto: Sean Penn, Tim Robbins, Kevin Beacon.
País y año: Estados Unidos, 2003.
Duración: 137 minutos.
Clasificación: B+
Opinión: Magnánima – Buena – Entretenida – No estuvo tan mal – No tuve opción
La historia comienza cuando tres amigos: Jimmy, Sean y Dave se encuentran jugando en su vecindario; inesperadamente, Dave es secuestrado y su vida toma un rumbo insospechado. Veinticinco años después, los amigos se reencuentran a causa de una lamentable tragedia: el asesinato de la hija de Jimmy (Sean Penn), el policía de la investigación es Sean (Kevin Bacon) y la persona clave para descubrir al asesino es Dave (Tim Robbins).
Río Místico está a punto de cumplir una década de haber sido estrenada. Hablemos de números: esta película fue acreedora a 6 nominaciones al Óscar, incluyendo mejor película, mejor guion y mejor actor. En dicha entrega, Sean Penn y Tim Robbins resultaron ganadores como mejor actor y mejor actor de reparto, respectivamente.
Ahora me enfocaré en la historia, y la podría describir como estupenda, magnífica. El guión es perfecto y la fotografía maravillosa. El resultado de la combinación de todos estos factores es una historia que te atrapa durante casi más de dos horas.
En la narrativa encontramos el desarrollo de historias paralelas que llevarán a la resolución del crimen, también, se descubren detalles de los personajes que permiten entenderlos y conocer el porqué de sus acciones. Es una historia que de una u otra forma hace que te pongas en los zapatos de los personajes y te sientas identificado con las diferentes situaciones que se presentan.
Más que una crítica, lo que he escrito es una recomendación, una invitación para que la vean.
Lo que jamás pasó desapercibido:
– La desgarradora actuación de Sean Penn y Tim Robbins.
– La demanda social en contra de pederastas.
– La sed de venganza.
– La vida te cambia en un segundo.