EL ISSSTE BAJO EL FOXISMO
Parte 5
Gustavo Leal F.
División de Ciencias Biológicas y de la Salud
Departamento de Atención a la Salud
Area de Investigación en Salud y Sociedad
2005: MAS DE LO MISMO, PERO MUCHO PEOR
1.- ¡Jubilados, pero no vencidos!1
Después de que los profesores de Chihuahua zarandearon en Ciudad Juárez el vehículo que transportaba a Vicente Fox para exigirle que los escuchara antes de imponer -como en el IMSS de Santiago Levy- su “reforma hacendaria” del ISSSTE; después de que la CNTE reiteró, por enésima ocasión, que mantendría la “alerta roja” para evitar que los legisladores aprobaran “al vapor” reformas que lesionan a los trabajadores de la educación, el senador priísta y líder de la FSTSE, Joel Ayala Almeida, se animó finalmente a tomar la palabra.
El 19 de diciembre, poco antes del Día de los Inocentes, Ayala comunicó que después de un “amplio” consenso, “su” federación aprobó “crear un órgano financiero -administrado por el Estado y las organizaciones sindicales- para negociar con el dinero de los burócratas”.
Para este insigne priísta que, entre otras gracias, votó aprobatoriamente el pasado 5 de agosto la iniciativa Beltrones-Levy -que cercena unilateralmente el régimen de jubilaciones y pensiones de los trabajadores del IMSS-, ahora resulta que ese órgano “financiero” concentrará y someterá a esquemas de inversión las aportaciones de poco más de 2 millones de empleados públicos y del gobierno federal adscritos al ISSSTE.
Pero ¿cuándo y dónde consultó Ayala a los trabajadores que dice representar? Lo único evidente es que, de cara a la “reforma hacendaria” del ISSSTE que quieren imponer Fox, Francisco Gil Díaz y Benjamín González Roaro, la FSTSE “de” Ayala plantea que ese “órgano” genere recursos para “garantizar la viabilidad” del fondo de pensiones del ISSSTE.
No es claro por qué Ayala se “ocupa” precipitadamente de buscar “solución” al fondo de pensiones del ISSSTE, antes de exigir al gobierno del “cambio” una auditoria integral de los seguros y recursos que ese instituto ampara; recursos propiedad de unos trabajadores a los cuales él supuestamente se debe.
Aunque Ayala estima que su “idea” suena sencillamente “un tanto revolucionaria” y, con gran entusiasmo declara: “por qué no hacernos a la idea de que puede funcionar un mecanismo transparente, bipartito (gobierno y trabajadores), apuntalado con los candados necesarios, que haga las veces de una Afore pública pública (sic) que invierta en áreas altamente redituables”. ¿Como cuáles? Ayala cita la explotación de gas natural, la refinación de combustible, la construcción de carreteras de cuota, la cuenca de Burgos y la construcción de vivienda.
¿Quiere decir, acaso, que el actual fondo de pensiones del ISSSTE no es “transparente” ni cuenta con los “candados necesarios”? ¿Para que sirve, entonces, la H. Junta Directiva del ISSSTE, en la cual participan la SHCP, la STPS, la SSA y la propia Presidencia de la República?
Pero eso no es todo. Si Ayala se desvela tanto por constituir una Afore pública pública que “invierta en áreas altamente redituables”, cabe preguntar ¿en qué se distinguiría de una Afore privada privada? ¿Es que, acaso, las Siefores no están ya invirtiendo en esas áreas “altamente redituables”?
Más grave es que, yendo contra el propio “nuevo” consenso del Banco Mundial (Gill, Packard, Yermo, 2004, Keeping the promise of social security in Latin America, Stanford University Press), que ya reconoce y asume la incapacidad del sistema de cuentas individuales para generar un nivel de retiro digo, Ayala omita deliberadamente mencionar que su Afore pública pública operaría igualmente sobre el esquema de cuentas individuales.
Además, como en la propuesta (México-Technical Assistance for Public Sector Social Security Reform, ISSSTE) que el Banco Mundial dictó a la SHCP -que ella filtró al Senado de la República bajo el título Una propuesta de reforma al ISSSTE- y que Benjamín González Roaro (representando a la “maestra” Elba Esther Gordillo) mal repitió en “su” reunión con la Conago en Toluca (agosto de 2004), también para Joel Ayala los futuros trabajadores son lo que menos importa: “una propuesta seria”, sostuvo, “es que los trabajadores participen con 37 años de servicio para obtener su jubilación (actualmente son 30), que contribuyan con 20 años de cotización y tengan como mínimo 65 años de edad”.
Tal vez lo que le “suena” verdaderamente “revolucionario” de su “idea” al senador Ayala Almeida sea el jugoso manejo y administración de los recursos de las pensiones de los trabajadores por “su” central, la FSTSE, y la “innovadora” Afore pública pública que, sueña, como en el caso de las Afores privadas privadas, disponen de un concepto muy preciso para connotar esa “revolución”: ¡comisiones!
Sólo faltaba que, francamente fascinado con lo “altamente redituable”, Ayala terminara comunicando que “su” federación impulsará la instalación de casinos en México porque son una “fuente de empleos”.
Con timidez, al festejar el 45 aniversario del ISSSTE, Vicente Fox presumió de unos “intensos diálogos” que jamás han acontecido, aunque también llamó a emprender una “reforma integral” basada en un “amplio y democrático proceso”.
¿Cuándo empezará Joel Ayala ese “democrático proceso” para legitimar su uso “revolucionario” de los fondos de pensiones de unos trabajadores que todavía no ha consultado? De algo puede estar seguro: mientras, como las Afore, se afiebra sumando comisiones de flujo y saldo, los trabajadores del ISSSTE y de la CNTE gritan ¡jubilados, pero no vencidos!
2.- “Alerta roja” frente a los fraudes con la vivienda en el ISSSTE2
El pasado 17 de diciembre el ISSSTE comunicó que “ya realizó” acciones en varios estados de la República para dar solución a los derechohabientes ante la falta de cumplimiento de los contratos por parte de las empresas constructoras de vivienda.
Las autoridades institucionales informan que han levantado un diagnóstico en las 32 entidades federativas, particularmente en los conjuntos habitacionales con mayores problemas ubicados en Sonora, Veracruz, Estado de México y Durango. Pero ¿será que el incumplimiento recae exclusivamente en las empresas?
Desde 1992, el Fondo de Vivienda del ISSSTE (Fovissste) dejó de promover la construcción de módulos habitacionales y, ahora, su “función” reposa en operar como una suerte de “entidad financiadora” de los trabajadores, porque corresponde a ellos “elegir” a la empresa de su preferencia. ¡Qué modernos!
Sin embargo, la información que publicó La Jornada respecto a los casos de fraccionamientos –como Las Pichoneras en Colima (11/11), Vasconcelos, Felipe Angeles, Robinson, Revolución, El Cristo, Burócratas, Arboledas de Saucillo, David Alfaro Siqueiros y Presidente de Jiménez en Chihuahua (22/11), Estela Morales Ochoa (madre de Elba Esther Gordillo) en Comitán (27/11) y San Pablo I y II y Los Pastizales en Querétaro (14/12)-, muestran que junto con la “falta” de cumplimiento de las empresas (Covosa, SA de CV, Argos Quma, SA de CV, Ocozoc Construcciones, SA de CV, Calif, Desarrollos GM, Navicob, Mesal, Deca, M.A. Inmobilaria, Construcciones y Servicios, entre otras), financieras (como la Financiera Consorcio Mexicano de Fomento Internacional) e hipotecarias (como Bancrecer), pesa también la responsabilidad del propio ISSSTE.
No obstante, muy a tono con la frivolidad que ha caracterizado a Julio Frenk y Santiago Levy en su calidad de integrantes del gabinetazo del “cambio”, también la oficina de González Roaro esquiva el problema de fondo: la responsabilidad directa del “liderazgo” del SNTE en las manos de la “maestra” Gordillo.
Al final del cuarto año de “gobierno” de Fox, el ISSSTE se propone apenas – y bastante tarde- empezar a “rendir cuentas”. Su “meta” para el 2005 consiste en “avanzar en por lo menos dos proyectos de rescate por estado”. ¡Menos que media aspirina!
¿Y los derechohabientes directamente afectados? ¿Y los responsables directos de estos escandalosos fraudes, como los “líderes” del SNTE? ¿Y el oscuro organismo Vivienda para el Magisterio (Vima) que dirigió Benjamín González Roaro (Proceso, 1356 )? ¿Y el papel de Banobras?
¿Nada tienen que observar al respecto los tecnócratas Francisco Gil Díaz y Alonso García Taméz, quienes desde la “flamante” SHCP del gobierno de la “alternancia”, con tanto entusiasmo abrazan y propalan (siguiendo a pie juntillas las recomendaciones del Banco Mundial y Eduardo Sojo) la inevitabilidad de una “reforma hacendaria” del ISSSTE? ¿Estarán siquiera enterados?
Todavía el 16 de noviembre, otro tecnócrata, Guillermo Ortiz, director del Banco de México, se atrevió a sostener que en México la reforma del sistema de pensiones ha ayudado a tener “un estable y alto crecimiento del ahorro: el mayor ahorro financiero de su historia” (sic). ¿En qué mundo vive? ¿Conocerá el último “sustantivo” incremento al salario mínimo? Y ya encarrerado se manifestó “a favor de una reforma del sistema de pensiones del ISSSTE, porque para 2020 las erogaciones presupuestales serán de 300 mil MDP, cantidad que ocasionará gran presión sobre las finanzas públicas”. ¡Híjole!
No obstante lo cual en la Comisión de Vivienda de la 59 Legislatura –que encabeza el perredista Marcos Carlos Cruz Martínez-, los diputados ya “trabajan” en una Iniciativa para otorgarle autonomía administrativa, técnica y financiera al Fovissste, ya que “corre un gran riesgo su viabilidad al depender del ISSSTE, organismo que enfrenta una crisis financiera por el déficit en pensiones”. Y es que en esta avanzada “propuesta”, Cruz Martínez contempla que por el “estado” que atraviesa el ISSSTE “se corre el peligro de que los recursos destinados para la construcción de casas- habitación se destinen a otros fines, por lo que los trabajadores no podrían acceder a una vivienda digna” (En Pleno, 23/11/04, p.31). ¡Como si no fuera suficientemente “peligrosa” la realidad de fraude que enfrentan los derechohabientes “sin casa” de Colima, Chihuahua, Comitán y Querétaro, entre muchos otros a todo lo largo y ancho del país!
Tal vez por ello la “maestra” Gordillo anunció el 18 de marzo pasado que promovería una reforma del ISSSTE capaz de construir una alternativa responsable para que ese Instituto fuera “eficaz para los trabajadores de la educación”.
En este cuadro, no sorprende que una de las principales demandas de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), reclame que, antes que cualquier “reforma hacendaria”, sea preciso establecer “las causas” de la situación actual del ISSSTE “así como a los responsables de la misma” (La Jornada, 17/12/04) y reitere que mantendrán la “alerta roja” para evitar que los legisladores aprueben “al vapor” reformas que lesionen los intereses de los trabajadores. Las nuevas protestas están, pues, a la inmediata puerta.
3.- Barril de pólvora3
Después de que el grupo magisterial Punto Crítico denunciara que, durante el “liderazgo” de la “maestra” Gordillo (1989-2004), el SNTE ha recaudado ¡más de 7 mil 700 MDP! por cuotas sindicales sin dar a conocer el destino de los recursos; después de que la rectoría de la Universidad Autónoma de Zacatecas reconociera que la institución está “al borde del colapso” por un formidable adeudo con el ISSSTE, Benjamín González Roaro –representante de la “maestra” en este noble Instituto-, reiteró que “el ISSSTE es como un paciente en estado crítico, pero con buenos doctores. Urge aprobar la reforma de su ley”.
Pocos días antes la CONADE declaró “desierta” la licitación pública para contratar un seguro de gastos médicos mayores que protegerá a más de 2 mil atletas de alto rendimiento con una cobertura de hasta mil salarios mínimos mensuales por cada enfermedad o accidente (1 millón 290 mil pesos) en hospitales privados de primera categoría, mientras el senador priísta y líder de la FSTSE –quién aprobó la “reforma” Madrazo-Beltrones-Levy que cercenó el Régimen de Jubilaciones y Pensiones de los trabajadores del IMSS- insistía en su “propuesta” de crear una Afore pública que maneje las cuotas de los trabajadores del ISSSTE; “consensuada” propuesta sobre la cual, según Ayala, la Secretaría de Hacienda “ya dio una buena señal y se llevan a cabo trabajos intensivos para que este proyecto no se vaya de las manos”.
Lamentablemente, después de que Francisco Gil Díaz asumiera en Washington que las reformas quedarán “pendientes y no creo que sea probable que se hagan en los dos años que quedan del gobierno de Fox”, el silencio se impuso en la tecnocracia hacendaria -salvo por la “experta” voz del parlanchín subsecretario Alonso García Tamés, quién repitió que “cada año que se posterga la reforma pensionaria del ISSSTE le cuesta al país 120 mil MDP”- y hasta el propio González Roaro coligió que la propuesta de Ayala todavía “tendría que estudiarse cuidadosamente y confrontar con la opinión de todos los sindicatos para lograr una iniciativa que realmente tenga el mayor de los consensos y pueda progresar”.
Sin embargo, González Roaro no tardó mucho en desandar su camino: con los maestros de la CNTE en la calle y en la Cámara de Diputados –donde solicitaban auditorías a las cuentas del ISSSTE-, aclaró, ahora, que una Afore pública para el manejo del fondo de pensiones de Instituto “es muy posible”, aunque matizó: siempre y cuando se deje a los trabajadores “en libertad de elegir entre una administradora pública y una privada. Debe haber una opción amplia”.
¿Cómo por ejemplo cuál? El representante de la “maestra” no duda: los trabajadores del ISSSTE deben “elegir” entre una Afore pública –que aún no existe, y de existir, no resolvería el problema estructural de las pensiones de México, como prueba la Afore Siglo XXI del IMSS- y una “infraestructura que le ha costado mucho al país” ¿Cuál? El sistema privado de afores. De ahí que, con impostada solvencia, González Roaro sentencie: la Afore pública “debe tener la posibilidad de competir en igualdad de condiciones con las privadas”.
¿Igualdad de condiciones? Esta ilusión de González Roaro confirma que su soñada reforma “integral” solo consiste en trasladar más de dos millones de cuentas individuales de los trabajadores del ISSSTE al sistema de afores, mismo que enfrenta dificultades de rentabilidad y cuyas Siefores ya reciben cerificados bursátiles de PEMEX hasta por 70 mil MP. Esa y ninguna otra, es también la “preocupación” que desvela al afligido subsecretario Alonso García Taméz. ¡Valiente gobierno del “cambio”!
En este cuadro muy poco esperanzador, Rosa María Farrell del despacho Hewitt Associates –a cuyos servicios han recurrido Levy y González Roaro- recién comunicó que el 90 por ciento de las empresas formales en México, carecen de un sistema adicional privado de pensiones. Ello impide que sus trabajadores cuenten a su retiro con un ingreso extra al de la jubilación de Ley. Sólo mil 800 firmas disponen de un plan fondeado y hasta el 70 por ciento son transnacionales. Agréguese que apenas el 8 por ciento del total de los trabajadores afiliados al IMSS tiene un plan privado de pensiones y su cobertura nacional difícilmente abarca al 3 por ciento de la PEA. Además de las consecuencias negativas para los trabajadores -que recibirán magros recursos al final de su jubilación-, las empresas desaprovechan las ventajas fiscales. Las inversiones de estos planes en México suman 10 mil MDD, frente a los 64 mil de las Afores. ¿Hay algo mejor que el fondo de pensiones del ISSSTE?
Cuando, sólo en 2004, Hacienda “canceló” 12 mil plazas del gobierno federal, se comprende que los trabajadores del ISSSTE no sólo no compartan el entusiasta escenario que pintan González Roaro, García Tamés y Alvaro Madero desde la presidencia de la Amafore, sino que rechacen abiertamente esa “tentadora” Afore pública.
Hasta Ricardo Pontigo, nuevo secretario general del SNTISSSTE, estima que “cualquier modificación a la ley del ISSSTE, debe ser avalada por el gremio”. González Roaro está sentado en un barril de pólvora.
4.- Paya confesión de parte4
Alterado y ofuscado, con la sombra de la “maestra” Gordillo cayéndole pesadamente sobre el lomo, por fin, Joel Ayala soltó la sopa. “Ella misma me lo dijo: ‘me acaba de dar el ISSSTE el Presidente Fox’. Y me dijo directamente: ‘voy a poner ahí a Benjamín, te pido que vayas a su toma de posesión’, todo esto es cierto”. Aunque también es cierto que, como siempre y con su ya proverbial mansedumbre, Ayala cumplió al pie de la letra las instrucciones de la “maestra”.
Su “comunicación” con Elba Esther Gordillo, solía acontecer en esos términos poco persuasivos: “No Joel ten los huevos, que quieres tener con una mujer para decir, ¿quién es más importante el SNTE o el hijo de Murat? Mañana te comunicamos que nos salimos de la FSTSE, ya no hay vuelta nos vamos de la FSTSE y punto, lo voy a hacer cabrón, lo voy a hacer” (¿Elba de Troya o Lady Macbeth Gordillo?, p.81).
Esa sopa fue la primera respuesta del senador priísta y líder de la FSTSE Joel Ayala -que él mismo calificara como “radical” frente al gobierno de Vicente Fox “para todo tipo de negociaciones, sobre todo en el ISSSTE, porque la verdadera directora es Gordillo y su asistente es González Roaro”-, después de que conociera el fallo de la Suprema Corte que ordena al Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje otorgar el registro a la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (FEDESSP).
Esta Federación Democrática surgió del desprendimiento que encabezaron 14 agrupaciones el 5 de diciembre de 2003, alegando falta de democracia efectividad de la FSTSE: “el saldo de la dirigencia del senador Ayala es reprobable, el sello de su gestión se caracteriza por un ejercicio unipersonal”, sostuvieron entonces. ¡Cómo si el de Gordillo “se caracterizara” por lo contrario!
Los “democráticos” aseguran contar con 1.6 millones de trabajadores al servicio del Estado: 8 de cada 10 servidores del Gobierno federal que se reúnen en el SNTE y los sindicatos de la SAGARPA, SEDESOL, Metro y SCT.
Y mientras el diputado Alonso Raya, presidente de la Comisión de Seguridad Social, denunciaba prisa e intensos cabildeos del gobierno de Fox para que se aprueben reformas al ISSSTE que sólo beneficiarán a la Afores y que “sin darse cuenta, están tentando al tigre, al México profundo, con la zaga de serios problemas de estabilidad política”, Joel Ayala soltó su segunda respuesta: el fallo sólo fortalecerá la “política entreguista” de Elba Esther Gordillo” dijo, y en tono de amenaza agregó “sin afán de revanchismo” que la FSTSE aceptará la solicitud de afiliación que han presentado grupos de maestros de 17 entidades, incluyendo el DF, quienes han expresado su interés de separarse del SNTE.
Y francamente encarrerado remachó: “les voy a dar celeridad a las peticiones formales hechas por trabajadores de la educación que pertenecen al SNTE para hacer sindicatos independientes y que se quieren afiliar a la FSTSE. Tan sólo en Tabasco hay 13 mil 800 trabajadores que quieren abandonar a Gordillo”.
Pero lo cierto es que ni Joel Ayala con su fantástica afore pública, ni la “democrática” Federación recién reconocida, han consultado todavía a los trabajadores del ISSSTE. Apenas hace unos días, los sindicatos sectorizados en SAGARPA manifestaron su repudio a la reforma de ese Instituto (La Jornada, 21.1.05) y la FDSSP reiteró su decisión de seguir construyendo un sindicalismo combativo, moderno y democrático que privilegie el debate de ideas, la horizontalidad en la toma de decisiones y el trabajo colegiado (La Jornada, 27.2.05).
Desandando su camino previo, el propio Benjamín González Roaro desde la dirección del ISSSTE, terminó estimando “muy posible” una afore pública siempre y cuando se deje a los trabajadores –que él aún no consulta- en “libertad de elegir entre una administradora pública y una privada”. ¡Una franca ilusión! Y, sin embargo, tampoco los consultó para promover –vía los senadores Marcos Carlos Cruz (PRD) y Alberto Miguel Martínez (PAN), presidente y secretario de la Comisión de Vivienda- un decreto que reforma al FOVISSSTE, separándolo definitivamente del Instituto.
¿En manos de quién está el futuro de los fondos de pensiones, médico, vivienda, tiendas, farmacias y el TURISSSTE que son propiedad de los trabajadores al servicio del estado concentrados en el ISSSTE? ¿De los caprichos de Fox para premiar a la “maestra” Gordillo? ¿De la fantástica reforma “integral” que publicita Benjamín González Roaro, su “representante” en el Instituto? ¿Del parlanchín subsecretario de Hacienda, Alonso García Taméz que se devela después de haber decidido “quebrar” al ISSSTE desde su computadora personal? ¿De Joel Ayala y su afore pública? ¿De la “horizontalidad en la toma de decisiones” que presume la FEDESSP? ¿Del PRI-Madrazo que, con el apoyo de Manlio Fabio Beltrones y suguiendo al obstinado Santiago Levy, ya cercenó el Régimen de Jublilaciones y Pensiones de los trabajadores del IMSS sin haberlos siquiera dejado hablar?
¿Quién les ha preguntado algo a los trabajadores del ISSSTE?
5.- ¿A quién benefician los recursos de los pensionados?5
Las pensiones constituyen la principal fuente de financiamiento en la Bolsa. Pero ¿qué ganan con ello los trabajadores dueños de esos recursos?
Hoy sabemos que el exceso de liquidez de las Siefores, fondos de pensiones, sociedades de inversión y aseguradoras permite financiar programas de deuda -vía el mercado de valores- de los gobiernos federal, estatal, municipal así como de algunas empresas.
Según IXE Grupo Financiero, ese financiamiento suma 350 mil MDP y uno de los principales emisores de deuda es PEMEX con 59 mil MDP.
Por su parte, los fondos de retiro financian al gobierno con más de 267 mil MDP (Cetes, Bondes o pagarés de infraestructura carretera, PICS).
Otra parte de esos recursos financia a Banorte, Banamex. Sociedad Hipotecaria Federal, Cemex, América Móvil, Ford, KOF y Carso Global Telecom. Y próximamente financiarán también a Fonacot, CFE, Infonavit, Constructora GEO, Crédito Casa y Credito Real, America Telecom., Movistar y Metrofinanciera. Bonito, ¿no?
Por algo, hasta el tecnócrata salinista Pedro Aspe -que Roberto Madrazo amenaza con integrar a su gabinete si gana las elecciones del 2006- insiste en que “México desaprovecha una bolsa de 400 mil MP que representan los fondos de las pensiones de los trabajadores en Afores”.
Porque en su “experta” opinión “el trabajador mexicano promedio tiene 35 años de edad y se jubila a los 65, lo que hace que estos fondos estén disponibles para 30 años”. Y, agrega, “esto significa que las Afores van a ser, de facto, las dueñas de las principales empresas en México y permitirá que el mercado bursátil incremente hasta en 19 veces su liquidez y profundidad en los próximos años”. ¿Recordará Madrazo la responsabilidad directa del solvente Aspe en el “error” de diciembre?
A pesar de todo este optimismo tecnocrático, gracias a Fox, Sojo, Beltrones, Levy y González Roaro, los pensionados mexicanos viven en la más franca de las penurias. Pagando, en virtud de la incompetencia de Julio Frenk carísimos medicamentos y con servicios de salud muy por debajo del nivel de “calidad” con que Fox los recibiera de Zedillo, los apocalípticos diagnósticos oficiales a cargo de Levy y González Roaro, les construyen un futuro todavía peor.
Baste considerar que, además de la misiva que remitieran a Fox cuatro generales -que mientras prestaban servicios percibían salarios cercanos a los 133 mil pesos y que hoy devengan pensiones de sólo 17 mil pesos mensuales- donde solicitan se integre una comisión que estudie, revise y resuelva sobre las pensiones de los integrantes de la Fuerzas Armadas, ahora sucede que más de 48 mil jubilados de los, ya desaparecidos Ferrocarriles Nacionales de México, temen que el fideicomiso de seguro de vida y pensiones que soporta su raquítico ingreso pueda extinguirse “antes de que muera el último exferrocarrilero”.
Sustituyendo al fondo Previsión Obrera que por malos manejos terminó -como el IMSS-Levy- “inexplicablemente” desfalcado, ese fideicomiso -creado por Zedillo en el año 2000 y administrado por Nafinsa-, se constituyó con 56 mil jubilados y 346 MP. Hoy día, sólo reúne 297, a pesar de que capta cuotas descontadas mensualmente a los exferrocarrileros por más de un MP.
Cerca de 40 mil jubilados demandan que las cuatro firmas que obtuvieron la concesión del servicio -TFM, Ferrosur, Ferromex y Terminal ferroviaria del Valle de México- paguen adeudos pendientes de la paraestatal por mil 600 MP porque esas empresas “no pueden deslindarse de obligaciones laborales contraídas por Ferronales como aguinaldos e incrementos de pensiones”.
Después de que en enero, el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, asumiera en Washington que las reformas quedarán “pendientes y no creo que sea probable que se hagan en los dos años que quedan del gobierno de Fox”, desde la dirección del ISSSTE, González Roaro sepultó la reforma del ISSSTE al estimar que ella “se trasladará al siguiente sexenio porque no hay acuerdos y es un largo camino por recorrer”.
Cuarenta y ocho horas después matizó: “en la conversación fui insistente en señalar la necesidad de seguir avanzando en la reforma del ISSSTE” (El Economista, 16/3), aunque la propia SHCP reiteró que durante los próximos meses se trabajará con el Congreso “para impulsar la reforma de pensiones de los trabajadores del Estado” (La Jornada, 21/3), sólo para trasladar más de 2 millones de cuentas individuales al sistema de Afores y seguir inyectando liquidez a las Siefore, mientras los trabajadores dueños de los recursos apenas mal sobreviven.
Y mientras Fox y Marta Sahagún reconocían el Programa Sigamos aprendiendo en el hospital, que impulsa el ISSSTE, miles de maestros y médicos chiapanecos manifestaban en las calles de Tuxtla su absoluto rechazo a las reformas a la Ley del ISSSTE. Por su parte, los jubilados la Unión Nacional de Jubilados y Pensionados de Bonos Patronato del Ahorro Nacional, A.C., denunciaban el retiro unilateral del servicio médico subrogado del Sanatorio Durango al que solían tener derecho.
¿A quién benefician, entonces, los recursos de los pensionados?
6.- Nubarrones sobre la “reforma” del ISSSTE6
Por más que los apocalípticos escenarios de Alonso García Tamés desde la secretaría de Hacienda y González Roaro desde el ISSSTE, sigan presionando sobre su “reforma”, los trabajadores la condicionan o señalan claramente su inviabilidad. Y hasta un diputado elbista, Alonso Raya, ya la remite al próximo sexenio.
Para postular su “inevitabilidad” comparecen las voces más disímbolas. Por ejemplo, paseando por Paris, Josefina Vázquez Mota, secretaria de Desarrollo Social -“profunda” conocedora del tema-, se atrevió a manifestar -ante el secretario de la OCDE Donald Johnston- que en México son “necesarias reformas estructurales para enfrentar al problema de pensiones”, toda vez que, como observa el Banco Mundial, el “actual sistema es regresivo y da la impresión de que difícilmente puede tener un respaldo financiero”. Afortunadamente se trata sólo de una “impresión” y no de la certeza con que sus oficinas maquillan el “impacto” en salud del programa zedillista Progresa, hoy Oportunidades.
Operan en el mismo sentido las voces del BBVA-Bancomer, del tecnócrata Javier Beristáin Iturbide desde la Afore Siglo XXI y de la CONSAR, por más que, casi cuatro meses después de la apertura del régimen de inversión a instrumentos de rendimiento variable, el sistema de AFORES sólo les haya destinado menos del 1 por ciento de sus recursos totales.
Mención especial merece el “transformado” senador priísta Joel Ayala -cabeza de la FSTSE- quién, después de predicar hasta el hartazgo su Afore “pública-pública”, optó finalmente por “romper” las relaciones con la Junta Directiva del ISSSTE “hasta que no se lleve a cabo una auditoria al Instituto. Si la reforma urge”, sostuvo, “es por la pésima administración del ISSSTE que tiene ahora y que tuvo en algunos casos en el pasado”. Curiosamente, esta demanda fue anticipada por los sindicatos desde el remoto 2002.
Matizan y condicionan la “reforma”, la CEPAL, la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos y -a diferencia del diputado priísta Marco Antonio García Ayala, secretario general del SNTSSA quien la aguarda “lo antes posible”-, Ricardo Pontigo, titular del SNTISSSTE, ha establecido que su sindicato “no está tranquilo ni confiado” y que en la “reforma” tiene que “entrar el seguro médico, porque en el ISSSTE hay un rezago de 10 mil puestos”.
Y están abiertamente en contra, los maestros de la CNTE, la UNT, ASPA, SAGARPA, CONADE y diferentes secciones del SNTSSA, como la 50, en Tuxtla Gutiérrez.
Mientras tanto los secretarios Canales Clariond, Elizondo Barragán y Reyes Taméz fueron denunciados ante la SCJN por desacatar en 2002 una sentencia ejecutoria que amparó a 25 maestros jubilados de la UANL para que no se les retuviera el 9 por ciento de su salario para el fondo de pensiones, al tiempo que 66 diputados de la ALDF –sus 56 cónyuges y 80 hijos- desdeñaban al ISSSTE, por disfrutar una póliza de gastos médicos mayores y menores ilimitados, contratados con Novamedic, por casi 5 MP y pagados con recursos públicos para ser atendidos en los hospitales Ángeles del Pedregal y ABC.
Sin embargo, el ISSSTE presumió haber recibido el certificado de calidad ISO 9001-2000 para su subdirección general Jurídica, mientras se difundía que 14 exdirectores generales de BANCOMEXT (Enrique Vilatela, Humberto Soto, Alfredo Phillips), NAFIN (Jorge Espinosa, Ernesto Marcos, Juan Páramo, Oscar Espinosa Villarreal, José Angel Gurría, Arturo Ortiz, Carlos Sales) y BANOBRAS (José Dávila, Victor Juvencio, Humberto Sandoval, Gregorio Matus) cobran pensiones millonarias, pese a que la mayoría laboró sólo unos cuantos años en ellas
Y también los magistrados se sirven con la cuchara grande. El Comité de Gobierno y Administración de la SCJN, decidió que sus integrantes dispongan con un seguro institucional que cubre fallecimiento o incapacidad total y permanente por 40 meses de percepción ordinaria.
Y eso no es todo: su seguro de gastos médicos mayores asciende a 740 salarios mínimos y cubre a cónyuges e hijos de hasta 25 años. Además de ayuda para anteojos, pago por defunción de cuatro meses de percepción total mensual, ayuda para gastos de defunción por 30 mil pesos; ayuda prejubilatoria de un mes de sueldo antes del retiro y estímulos: por jublilación, 25 mil pesos; por antigüedad, mil pesos por año de servicio y por incapacidad médica permanente, 25 mil pesos. Las prestaciones propias al cargo incluyen ISSSTE, FOVISSSTE y SAR ¡Nada mal!
Según la Auditoría Superior de la Federación, estas prestaciones onerosas se sustentan en 11 fideicomisos que también les cubren pago de predial, consumo de agua, energía eléctrica y gas, recibo telefónico y la creación de un fondo para la compra de casas. ¡Faltaba más!
Pero a pesar de que los pacientes del ISSSTE carecen de lo más indispensable y, a febrero de 2005, el Instituto jubila 600 trabajadores por semana, González Roaro demandó a los diputados “pasar del diálogo y el análisis a propuestas concretas”. Sólo faltaba que Enrique Moreno Cueto, subdirector general de Prestaciones Económicas, mal emulando al tecnócrata hacendario García Tamés, amenazara con que “se requiere concretar la reforma” porque “en el mediano plazo, se puede complicar”. ¡Uy!
Nubarrones sobre otra “reforma” foxista que, como hasta el elbista Raya aprecia: “el Gobierno que siga, tendrá que enfrentar”.
7.- ISSSTE: “reformadores” sin “reforma”7
Una vez que el tecnócrata zedillista Santiago Levy estrenara la melodía del discurso apocalíptico gubernamental que pretendió hundir al IMSS (Informe sobre la situación financiera 2002), otra chillona tonada –similar- empezó a escucharse para el ISSSTE.
Primero la instrumentó su director, Benjamín González Roaro: aunque el ISSSTE sea “un enfermo muy grave, no es incurable”, declaró en agosto del 2002. Pero por su pobre audibilidad, fue preciso que -compitiendo abiertamente con Levy- correspondiera al estridente subsecretario de Hacienda, Alonso García Tamés, articular la nota más aguda “cada año que nos tardemos en realizar la reforma, implica dos puntos del PIB”, trinó en junio de 2004. Pero su voz parece haberse apagado, pues, ahora, la SHCP ha recurrido a un corista muy menor: José Antonio González Anaya, director general de Seguros y Valores, quién, repite como cilindrero, la misma aburrida canción que antes fascinó a Levy.
El 25 de mayo, González Anaya sostuvo que el tamaño de la deuda de los sistemas públicos de pensiones de México equivale a “10 veces la deuda externa: 116 por ciento del Producto Interno Bruto”! Y ya encarrerado, elevó la nota de su jefe Alonso García Tamés y asumió que “el déficit de pensiones del ISSSTE es del mismo tamaño o más grande que el de todo el gobierno federal, si no hubiese déficit en el ISSSTE, no tendríamos déficit fiscal. La reforma es impostergable, antes de que termine el sexenio”. ¡Ay, nanita! Para decirlo popularmente ¡que lo amarren!
Resultaría peregrino suponer que, antes de propalar tan sesudos cálculos, González Anaya no hubiera consultado a García Tamés, pero a quién sin duda no consultó, fue al jefe de su jefe: Francisco Gil Díaz, secretario de Hacienda.
Tan no lo consultó que, seis días después de sus apocalípticos cálculos, Gil Díaz comunicó oficialmente que las “reformas” estaban muertas y bien enterradas: “a partir de 2006”, indicó, el “mayor reto de las finanzas será resolver el tema de las pensiones”. Sólo restaba que, desde Los Pinos, llegara el aval del “competente” Dr Sojo: “falta que exista el consenso en el Congreso para sacar la reforma del ISSSTE adelante ”. Y hasta el Consejo Mexicano de Hombres de Negocios sentenció: el gobierno de Fox “perdió su oportunidad de hacer reformas. Ya se le acabó el tiempo”.
González Roaro se quedó sólo “reformando” en la loma. Aún así insistió: el déficit de pensiones del ISSSTE es el “problema de finanzas públicas más fuerte del país”, aunque finalmente tuvo que admitir “la posibilidad de que los cambios ya no se concreten con Fox”. No obstante lo cual, Hacienda siguió suministrándole balones de oxigeno, pues al decir de Jaime Jiménez, director de deuda pública de estados y municipios, por el bajo nivel de aportaciones, algunos sistemas estatales no capitalizan adecuadamente. Sólo en 5 entidades las aportaciones superan en 15 por ciento el salario de cotización.
Mientras tanto, seguían estallando paros médicos como el del Hospital Ismael Vázquez Ortiz, en Querétaro, donde los galenos denunciaban las precarias condiciones en que laboran. Simultáneamente, la secretaría de la Función Pública “reconocía” al ISSSTE por los servicios que se otorgan en clínicas de medicina familiar mediante el sistema de Cita Médica Programada, aunque el Instituto reduzca hasta en 50 por ciento la adquisición de vacunas y los diputados federales –sin recurrir antes al ISSSTE- destinen más de 2 millones de pesos para desembolsos no cubiertos en sus seguros de gastos médicos mayores y menores, a cargo de Met-life.
Por su parte, en el Senado se impulsa la “descentralización de la operación presupuestal” del FOVISSSTE para convertirlo en INFOVITE, mientras la Comisión de Derechos Humanos de Yucatán adeuda casi un MP al ISSSTE por cuotas.
No es casual que en este marco -todo menos “reformador”- los afanes de los tecnócratas del foxismo se derrumbaran ruidosamente al no haberse detenido a consultar a los trabajadores y ordenar, primero, una auditoria integral al Instituto que el gobierno del “cambio” recibía de manos tardo-priístas. Curiosamente ¡cinco años después! el senador priíista Joel Ayala, cabeza de la FSTSE y quién aprobó la “reforma” Beltrones-Madrazo- Levy al IMSS, ahora estima “prudente” levantar esa auditoría.
Tampoco sorprende que ante la advertencia de maestros y servidores públicos: “no permitiremos un albazo en el ISSSTE”, hasta el diputado elbista Alonso Raya, presidente de la Comisión de Seguridad Social, señale que “Hacienda manipula las cifras con actitud tendenciosa para reformar la Ley. Su propuesta es inviable desde el punto de vista político y social, porque abre la vía del conflicto. Quieren espantar, no solucionar de fondo. La reforma debe ser democrática” ¡Y esto lo dice un elbista!
Finalmente y a pesar de su chillona tonada, Benjamín González Roaro cierra su paso por el foxismo en calidad de un “reformador” que se quedó sin “reforma”. Pero la mesa está puesta: según Verónica González directora general de Metlife Afore, el mercado de los trabajadores independientes así como el de los del ISSSTE “resulta sumamente atractivo para nuestra compañía. Sin embargo, es necesario modificar la Ley para que las aportaciones obligatorias de los trabajadores al fondo de retiro sean administradas por las Afore”. ¡Sencillo! ¿no?
8.- Los chinchones llegaron al ISSSTE8
Entre chinchón y chinchón, pareciera que, además de la memoria Acteal, Emilio Chuayffet -coordinador de los diputados del PRI- empezara a perder, también, el principio de realidad política.
Como si sus asesores no le hubieran informado suficientemente sobre la apocalíptica situación que -como Levy en el IMSS- han fabricado Benjamín González Roaro y la Secretaría de Hacienda para el ISSSTE, Chauyffet se lanzó sin capote al ruedo y ¿amenazó? confíar “en que asuntos pendientes, como la reforma de la Ley del ISSSTE, se modifiquen en el próximo período ordinario de sesiones”. ¿Será que ya está desesperado por integrarse al “equipo” del Lic. Madrazo?
Pero, sus “confianzas” recibieron de inmediato un cubetazo de agua helada: el diputado elbista, Alonso Raya -presidente de la Comisión de Seguridad Social- denunció que el “acuerdo político” en torno a esta “reforma”, ya se ha concretado entre el foxismo y los grupos parlamentarios del PAN y del PRI. Al decir de este singular perredista, es preciso romper con ese discurso y hacer ajustes para distribuir las cargas entre el Estado, patrones y trabajadores. La negociación debe ser amplia. No podemos dejar esta responsabilidad en manos de agentes primarios como las Afores”.
Mientras tanto, José Antonio González Anaya -el ruidoso funcionario designado por Francisco Gil Díaz y Alonso García Tamés desde la SHCP para seguir machacando la “inevitabilidad” de la “reforma”-, seguía desgañitándose inútilmente. El 20 de julio declaró que sería una “reforma sería de Estado, porque la presente administración cargaría con los costos presupuestales más altos para llevarla a cabo”. Será ¿los trabajadores del ISSSTE no pagarán un costo todavía más alto?
¿Qué es lo que realmente busca la “reforma integral” de la SHCP? Busca consumar la aforización de 2.5 millones de trabajadores activos, ¡cantidad nada despreciable!, dadas las comisiones y rendimientos de las Siefore. Y ¿cómo lograrlo? Abriéndoles una cuenta individual en una Afore, en la que el Estado depositaría en forma de bono la cantidad de recursos a que tendrían derecho si cumplieran los requisitos para el retiro. ¿Cuáles? La actual edad mínima, 55 años y 15 de cotización, sería ya irrelevante, toda vez que con la “reforma hacendaria”, ellos podrían jubilarse cuando hayan ahorrado lo suficiente para tener acceso a una pensión del doble de la mínima que el Estado garantizaría a quienes cumplan 65 años de edad, aparte del monto de sus ahorros.
¡Genial!: en una economía estancada, tú, activo, empiézale a correr: el negro futuro es tuyo. Ahora tú eliges la edad de retiro. Sólo que el tamaño de tu pensión dependerá, hoy, del “bonito” a futuro, más lo que acumules a partir de la entrada en vigor de la “reforma hacendaria” y, seguro, los intereses de ambos montos.
Nosotros, como Estado, ya nos difuminamos. Pero claro, si en virtud de un milagro logras ahorrar tanto como para completar una pensión del doble de la que te garantiza el Estado (salario mínimo), te puedes retirar independientemente de la edad que tengas. ¡A Cancún! Si no, tendrás que seguir laborando hasta los 65 años. Pero no te preocupes: en ese mismo momento, el Estado se responsabilizará de completarte una ¡fabulosa! pensión de un salario mínimo mensual (mil 357 pesos). Efectivamente: ¡fuimos el gobierno del “cambio”!
¿Y para los de nuevo ingreso? La “reforma hacendaria” es igualmente ¡brillante! Empiezan con las nuevas “reglas” y su fondo se integraría con la aportación de 3.5 por ciento del salario base, otro 3.5 por ciento a cargo de las dependencias, 2 por ciento del SAR y 5 por ciento del fondo de vivienda. Pero, a diferencia de los activos, González Roaro –asesorado por Hacienda- estima que los nuevos tendrán garantizada la pensión con base en su ahorro, el cual, a su vez, variará dependiendo del nivel salarial individual.
Aunque el déficit del fondo médico del ISSSTE asciende a 8 mil MP, la “reforma” carece de propuesta alguna. Para médicos, enfermeras y profesiones afines; para mil 122 clínicas familiares y mil 778 camas hospitalarias de segundo y tercer nivel, la SHCP todavía no define los contenidos por “reformar”. Como sostuvo Pedro Vázquez Colmenares, subdirector general de Finanzas del ISSSTE: hay que “crear un seguro de salud que asuma las obligaciones futuras y cuantifique los gastos a financiar”. ¡Un auténtico genio!
Y a pesar de los sonados fraudes con la vivienda en el ISSSTE, la “reforma hacendaria”, no dice una palabra, mientras el diputado perredista Marcos Carlos Cruz Ramírez se empeña en transformar al FOVISSSTE en INFOVITE, porque por el “estado” que atraviesa el ISSSTE “se corre el peligro de que los recursos destinados a la construcción de destinen a otros fines” ¡Zas!
¿Porqué habrían de apoyar los trabajadores esta curiosa propuesta “integral”? Como advirtiera el secretario general Ricardo Pontigo, el SNTISSSTE exigirá respeto absoluto a los derechos adquiridos, elegir entre un sistema de pensiones solidario o de cuentas individuales, que la “reforma” sea realmente integral y que no sólo enfoque el régimen pensionario.
Los chinchones en el ISSSTE muestran que la “reforma hacendaria” no mejorará el futuro de sus pensiones, servicios médicos y vivienda. El nuevo gobierno deberá empezar consultando primero a los trabajadores.
9.- ¿Viviendas “cómodas e higiénicas” en el FOVISSSTE?9
A fines de 2004 el ISSSTE comunicó que realizaba acciones en varios estados de la República para dar solución a los derechohabientes ante la falta de cumplimiento de los contratos por parte de las empresas constructoras de vivienda. Informaban que habían levantado un diagnóstico en las 32 entidades, particularmente en los conjuntos habitacionales con mayores problemas ubicados en Sonora, Veracruz, Estado de México y Durango. Pero ¿será que el incumplimiento recae exclusivamente en las empresas?
Desde 1992, el Fovissste dejó de promover la construcción de módulos habitacionales y, ahora, su “función” reposa en operar como “entidad financiadora” de los trabajadores, porque corresponde a ellos “elegir” a la empresa de su preferencia!
Sin embargo, la información publicada por La Jornada -en noviembre y diciembre de 2004- respecto a algunos de esos fraccionamientos en Colima, Chihuahua, Comitán y Querétaro, muestra con contundencia que junto con la “falta” de cumplimiento de empresas, financieras e hipotecarias, pesa también la responsabilidad del propio ISSSTE.
No obstante, muy a tono con la chabacanería que caracterizó al gobierno foxista, Benjamín González Roaro, director general del Instituto, esquivó el problema de fondo: la responsabilidad directa del “liderazgo” del SNTE en las manos de la “maestra” Gordillo.
Al final del cuarto año de “gobierno” de Fox, el ISSSTE se proponía apenas empezar a “rendir cuentas”. Su “meta” para el 2005 consistía en “avanzar en por lo menos dos proyectos de rescate por estado”. ¡Menos que media aspirina!
¿Y los derechohabientes directamente afectados? ¿Y los responsables directos de estos escandalosos fraudes, como los “líderes” del SNTE? ¿Y el oscuro organismo Vivienda para el Magisterio (Vima) que dirigió con Salinas González Roaro (Proceso, 1356 )? ¿Y el papel de Banobras?
Nada observaron al respecto Francisco Gil Díaz y Alonso García Taméz desde la SHCP, ni Guillermo Ortiz, desde el Banco de México. ¿Estarían siquiera enterados?
No obstante todo lo cual en la Comisión de Vivienda de la 59 Legislatura -que encabeza el senador perredista Marcos Carlos Cruz Martínez-, se labró una Iniciativa para otorgarle autonomía administrativa, técnica y financiera al Fovissste, ya que “corre un gran riesgo su viabilidad al depender del ISSSTE, organismo que enfrenta una crisis financiera por el déficit en pensiones”. Esta avanzada “propuesta”, contemplaba que por el “estado” que atraviesa el ISSSTE “se corre el peligro de que los recursos destinados para la construcción de casas- habitación se destinen a otros fines, por lo que los trabajadores no podrían acceder a una vivienda digna” (En Pleno, 23/11/04, p.31).
¡Como si no fuera suficientemente “peligrosa” la realidad de fraude que enfrentan los derechohabientes “sin casa” de Colima, Chihuahua, Comitán y Querétaro, entre muchos otros a todo lo largo y ancho del país!
Tal vez por ello la “maestra” Gordillo anunciaba, a voz en cuello, que promovería una reforma del ISSSTE capaz de construir una alternativa responsable para que ese Instituto fuera “eficaz para los trabajadores de la educación”.
Finalmente, el 2 de diciembre de 2005, la Comisión de Seguridad Social comunicó que la Cámara de Diputados “aprobó reformas a la Ley del ISSSTE para dar certidumbre a los recursos del Fondo de la Vivienda y resolver la problemática de los trabajadores que suscribieron convenios de créditos cofinanciados”.
Su “argumento” fue que la reforma del articulo 174 de esa Ley “separa del patrimonio del ISSSTE los recursos del Fondo de Vivienda”, para determinar con “claridad” que ellos “son propiedad de los trabajadores a favor de quienes se hacen las aportaciones”, toda vez que entre 1989 y 1997 se celebraron convenios de cofinanciamiento entre el Fovissste y la banca comercial (con 58 mil 365 trabajadores acreditados y prestamos o créditos por 4 mil 420 MP con 15 entidades acreedoras del Fovissste y de los trabajadores) en tres de las cuales se concentra el 80 por ciento de los créditos.
El monto inicial que prestaron los banco comerciales fue de 2 mil MP. Sin embargo, los pagos o amortizaciones a los bancos -al cierre de julio de 2005- ascienden a 5 mil 553 MP y manteniéndose el adeudo de 4 mil 420 MP.
De continuar el esquema de pagos, el Fovissste “estaría pagando a la banca privada 9 mil 973 MP, pero si se compra la cartera, el Fondo tendría un ahorro neto de 7 mil 896 MP” (Milenio Diario, 2/12/05).
Y, como si no fuera suficiente, el Grupo Parlamentario del PRD agregó -por separado- que con esta reforma aprobada en el Pleno de la Cámara de Diputados, “nuestro grupo parlamentario apoya el derecho de los trabajadores al servicio del Estado a la obtención de créditos baratos y suficientes para la adquisición de viviendas cómodas e higiénicas, así como para su mejoramiento” (La Jornada, 2/12/05).
Por su parte, el Senado de la República aprobó el 8 de diciembre la minuta que le remitiera la Cámara de Diputados.
En este cuadro, no sorprende que una de las principales demandas de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), reclame que, antes que cualquier “reforma”, sea preciso establecer “las causas” de la situación actual del ISSSTE “así como a los responsables de la misma”, demanda a la que habrá que agregar, ahora, a una Comisión de Diputados y a una fracción parlamentaria: la del PRD.
10.- Pierre Cardin merodea el ISSSTE10
La Primera Dama que ahora viste Pierre Cardin con modelitos que pueden alcanzar hasta 6 mil dólares -y que antes atendió a Brigitte Bardot y María Félix- llegó al Hospital Dario Fernández del ISSSTE en punto de las 11 de la mañana de ese memorable lunes 14 de noviembre.
Todo, absolutamente todo, estaba preparado y en su lugar. El evento -en la que estuvo flanqueada por Benjamín González Roaro, Reyes Tamez y, por supuesto, Julio Frenk, fue propicio par que la bien ataviada Señora conociera, “de cerca”, cómo opera el “fundamental” Programa Sigamos Aprendiendo en el Hospital. Toda estaba en su lugar y bien, muy bien preparado.
Puede decirse que tan, tan bien preparado que el hospital (General “B”, de segundo nivel y referencia nacional, con 14 especialidades quirúrgicas, 4 básicas y 8 subespecialidades) fue casi paralizado y los pacientes virtualmente abandonados a su suerte.
Para esta visita de “lujo”, por ejemplo, el Estado Mayor Presidencial tomó la instalaciones desde las 6 horas y cerró las puertas a las 11. Los usuarios debieron entrar por la puerta trasera (área de urgencias) y recibir la noticia de que no habría egresos hasta las tres de la tarde. Todas las consultas se vinieron abajo.
Los tradicionales custodios del portón principal fueron sustituidos. Dos integrantes del Estado Mayor, portando inmaculadas batas blancas completamente nuevas aunque sin identificación, se encargaron de controlar el acceso.
Los derechohabientes se transformaron en un santiamén en “personas sospechosas”. Tres días antes, pacientes, familiares y personal fueron objeto de minuciosas revisiones, interrogatorios y trato duro: “fue como un secuestro, nos trataron como terroristas, Como hubo cambio de guardias, no podíamos salir”, denunció el familiar de una mujer recién intervenida.
Simultáneamente arribaban al hospital un millar de trabajadores que, de inmediato pusieron mano a la obra: pulieron las aceras, arreglaron las persianas y dieron lustre a todos los puntos del recorrido que habría de realizar la Primera Dama.
Y mientras una paciente reclamaba “no es justo, porque las citas te las dan cada dos o tres meses y ahora voy a tener que esperar nuevamente a que me den otra y lo malo es que vengo desde Tlaxcala”, la Señora conocía “a fondo”, la escuela que tiene 20 computadoras, platicaba con los enfermos sobre sus estudios, visitaba el área de hemodiálisis donde los niños pueden accesar -vía una laptop– al Programa Encicomedia o a las materiales del INEA y Edusat. ¡Claro que, de paso, entregó certificados de secundaria a varios pacientes!
Dichosa a más no poder, afirmó: este Programa “sí es noticia, porque tiene que ver y refleja los tiempos nuevos que está viviendo nuestro País; tiempos de trabajar en equipo, donde el gobierno no le puede todo y la sociedad no puede sola”. ¡Zas!
Y es que los diseños exclusivos que ahora viste pueden definirse como elegantes, de Alta Costura y con un cierto toque “minimalista”: han arropado hasta a la célebre Jeanne Moreau. Aunque, ciertamente, en el ISSSTE las necesidades urgentes correspondan a un concepto un tanto cuanto diferente.
Según Manuel Urbina, subdirector general médico del ISSSTE, el déficit del fondo médico asciende a más de 8 mil MDP que deberían destinarse a la renovación de 25 mil equipos obsoletos y la ampliación de la infraestructura. Además, se requiere la contratación de 12 mil trabajadores (médicos, enfermeras, paramédicos y personal de apoyo en salud), de los cuales 900 se ubicarían en las clínicas de primer nivel que operan de manera precaria por falta de personal.
La infraestructura de clínicas y hospitales carece de capacidad para atender la demanda y el promedio de antigüedad del equipo es de 18 años. Se sustitución y compra sumaría 3 mil 800 MDP, cuando en 2004, apenas se dispuso de 457 MDP, de los cuales 12.6 se canalizaron a la reposición.
Urge fortalecer el primer nivel de atención debido a que por las carencias, las clínicas están imposibilitadas de resolver los padecimientos de los pacientes, lo que, a su vez, ocasiona la saturación de los hospitales de segundo y tercer niveles.
De las mil 122 clínicas familiares, sólo 440 pertenecen al ISSSTE: 52 son rentadas, 203 son subrogadas y 417 corresponden al rubro “otras”. Urbina calcula que para “hacer mejor uso de los recursos” y sustituir 30 por ciento de las ahora subrogadas, deberían edificar y equiparse adecuadamente 187 unidades de medicina familiar, así como el cien por ciento de las que hoy día se rentan.
Y aunque se cuenta con mil 778 camas hospitalarias para el segundo y tercer nivel, faltan otras mil 364. Las delegaciones de la zona metropolitana de la ciudad de México cubren 40 por ciento de los afiliados con un déficit de 971 camas.
Pero, ese día, la Primera Dama -quien también preside la afamada fundación Vamos México– iba muy bien vestida y lucía rebosante. Y, por fortuna, todo, todo estuvo en su lugar, muy, muy bien preparado. ¡Fue un exitazo! Hasta la directora del nosocomio, Luz María Goti, reconoció que las batas blancas que portaban dos miembros del Estado Mayor Presidencial, “son decisiones exclusivas de la Presidencia”. Lamentablemente, las prendas de Pierre Cardin están lejos del alcance de los derechohabientes del ISSSTE.
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1 La Jornada, 8 enero, 2005
2 La Jornada, 15 de enero, 2005
3 La Jornada, 26 de febrero, 2005
4 La Jornada, 12 de marzo, 2005
5 La Jornada, 9 de abril, 2005
6 La Jornada, 28 de mayo, 2005
7 La Jornada, 2 de julio, 2005
8 La Jornada, 27 de agosto, 2005
9 La Jornada, 17 de diciembre, 2005
10 La Jornada, 24 de diciembre, 2005